4.09.2010

ANTES DE QUE SE PONGA EL SOL




CAMINO A LA FONT DEL QUEROL

Hoy me he levantado optimista. He dado paso al comienzo de las mañanas andorreras, hace tiempo cambié la noche por el dia y disfruto de el en todo momento.
El principio de la primavera es una época estupenda para salir a recorrer camino matutino, activar el cuerpo, estirar las piernas y despejar la mente, es una buena terapia.
Acompaño a las nueve los niños a la escuela, cojo la directa, desde la escuela "Pirineu" ya va recto el tramo para llegar al "camí Ral i Ramader", donde empiezo un nuevo dia. Andar por senderos, aunque conocidos de toda la vida, siempre despiertan en mi algo nuevo.
El aroma a tabaco me indica que alguien, no muy lejanamente, se ha adelantado a mi. Es Marcial, con su "caliqueño", va dejando huella. Marcial es del pueblo, un señor de unos ochenta más o menos, muy simpático, buena gente que yo digo. Lo alcanzo con mi paso ligero, llego a su lado y me paro a charlar, me encanta hablar con todo el mundo, pero las personas mayores tienen un encanto especial, me gusta escucharlos. Es un tipo muy campechano, compadre de mi padre, pues son cuenquenses, del mismo pueblo... Intercambiamos conversa, unas palabras, son de agradecer de buena mañana. Aunque las gentes de los pueblos nos conocemos unos a otros, sabemos nuestras historias y demás, hay a personas que no les importa para nada mi pasado, siempre se han mostrado cordiales conmigo, se alegran de verme tan bien, con unos hijos tan estupendos y un compañero que ha sabido estar a mi lado, de eso estoy orgullosa.
Ya, dejandolo atras, con aire fresco, voy siguiendo. De ida, el rio Merdàs queda a mi izquierda, acompañandome con su murmullo, me gusta mirarlo entre ramajes, su caudal está bastante crecido, se nota que ha nevado este invierno. A su vez, el canto de pajarillos, de diversas clases y a la vista hermosas flores de todos los colores, los que más predominan son los violetas y morados, verdes y blancos, árboles que despuntan sus frutos al brillo del sol, que empieza a resplandecer entre las montañas, tiñiendo de claridad profundos bosques. A ese paso es cuando pienso que podría perderme por esos andurriales, dando vueltas incansables por los alrededores, sin perderme, como si se terminara el tiempo y no pudiera volver a verlos jamás, qué ilusa. De pasada por "La Font de St. Eudald", nombre típico de los contornos, una subida da lugar al camino que bordea la carretera de Gombren, a la derecha, la masia de "Coronetes", con sus vacas pastando entre prados verdes, no son vacas lecheras, son vacas de cria, marrones, preciosas, con ojos grandes y plácidas, no se inmutan al paso de la gente. Ya bajando, me encuentro con el viejo y pequeño puente, a ras de rio, inundable si el caudal se eleva un poco, a partir del puentecillo, el Merdàs queda a mi derecha, a mi izquierda campos de cultivo, ya queda poco, son unos tres kilómetros aproximadamente de ida, que se hacen cortos al paso de tan bello y fresco paisaje. El último tramo es recto, todo recto y se divisa ya el campo grande, lleno de pinares y una montaña, con un camino que puede desviarte al que llevará al "Torrent de la Cabana", o puedes subir por otro, atravesando a la montaña por detras, donde los cazadores de setas merodean durante la temporada.
A la vuelta, queda atras la fuente, de espaldas a ella, me incorporo de nuevo al camino que me lleva hasta casa...



2 comentaris:

emejota ha dit...

Y con ese entorno y esa capacidad de apreciarlo ¿qué otro nombre podrían haberte puesto? Enhorabuena, me alegra un montón conocer gente como tu. Un fuerte abrazo.

felicitat ha dit...

Eso dicen en mi casa, otro nombre no me hubiera pegado más. Y yo me alegro de tener flores en mi jardin.
Un queroabrazo, emejota!!!!